La empresa farmacéutica Fimea cambió recientemente la interpretación de la ley sobre las bolsitas de nicotina que no contienen tabaco. Con el cambio, ahora es posible vender bolsas de nicotina en tiendas, quioscos y gasolineras. Los sustitutos del tabaco están menos regulados que otros productos de nicotina, por lo que la selección de sabores y las concentraciones de nicotina en las bolsas de nicotina pueden variar significativamente.
La mayor disponibilidad de bolsas de nicotina debido a la venta sin restricciones aumenta el riesgo de que terminen en manos de niños y adolescentes menores de edad, especialmente a través del intercambio. Incluso una pequeña cantidad puede causar síntomas de envenenamiento por nicotina en un usuario sin experiencia, como aumento del ritmo cardíaco y náuseas. El contenido de nicotina no siempre se especifica, por lo que las concentraciones pueden ser incluso peligrosamente altas.
“El uso de bolsas de nicotina con un alto contenido de nicotina por parte de los jóvenes puede conducir a un estado de intoxicación grave. El uso de productos de nicotina en edades tempranas provoca cambios permanentes en la estructura y función del cerebro, por lo que los niños y jóvenes en particular deben ser protegidos de estos productos”, dice Katri SaarelaExperto de la Asociación Finlandesa de Psiquiatras (EHYT).
La nicotina es una sustancia altamente adictiva y los cerebros en desarrollo de los jóvenes son particularmente susceptibles a la adicción. Además, la nicotina aumenta la frecuencia cardíaca y puede predisponer a las personas a sufrir arritmias. Los estudios también han encontrado indicios del papel de la nicotina en el desarrollo y crecimiento de las células cancerosas.
Según la investigación, los sabores afrutados y dulces atraen a los jóvenes a usar productos de nicotina. Aunque los productos de tabaco y los líquidos de nicotina son saborizantes prohibidos según las leyes del tabaco, se permite que las bolsas de nicotina contengan saborizantes. Agregar saborizantes a estos productos crea la percepción de un producto inofensivo. Junto con la fácil disponibilidad, esto reduce el umbral para que los niños y jóvenes prueben y usen.
“Desde el punto de vista de la prevención del abuso de sustancias, es importante que las tiendas no incluyan bolsas de nicotina en su selección, aunque la ley lo permita actualmente. Incluso la verificación de edad en la caja registradora implica la distribución de bolsas de nicotina a menores. Cuantos más puntos de compra haya, más fácil es que el producto llegue a manos de niños y jóvenes”, dice Saarela.
Se deben aplicar regulaciones más estrictas a las bolsas de nicotina sin demora.
El Ministerio de Asuntos Sociales y Salud está preparando una propuesta para modificar la Ley del Tabaco. Propone agregar una definición de productos de nicotina sin humo que también cubriría las bolsas de nicotina y productos similares. En la práctica, esto significaría que se aplicarían las mismas normas que, por ejemplo, al rapé, a las bolsitas de nicotina, y ya no se podrían pedir en las tiendas online.
“Según la investigación, regular la disponibilidad es una de las formas más efectivas de proteger a los niños y jóvenes de comenzar a usar productos de nicotina. Por eso es importante que las bolsas de nicotina se ajusten rápidamente”, agrega Saarela.
HT
Fuente: La página nórdica